Conoce el panteón de los ilustres sevillanos
Panteón de los ilustres sevillanos, uno de los lugares con más historia de Sevilla
Descubre un rincón fascinante de Sevilla donde el tiempo se detiene y las historias de grandes personajes cobran vida. El Panteón de los Sevillanos Ilustres, un verdadero tesoro arquitectónico, no solo es un lugar de descanso eterno, sino también un homenaje a la cultura de la ciudad. Acompáñanos en este recorrido por su historia y sus ilustres moradores, y sumérgete en una parte oculta de la ciudad de Sevilla.
El Enterramientos más ilustres de Sevilla se encuentra en la cripta del Templo de la Anunciación, un sitio que ha sido transformado y protegido con mucho estilo arquitectónico. Entrar aquí es tan fácil como un clic en tu teléfono, simplemente accede desde la Facultad de Bellas Artes, justo al ladito de la puerta lateral del Templo, diseñado por el talentoso Hernán Ruiz II.
Desde ahí, solo necesitas bajar un par de tramos de escaleras para llegar a este espacio místico, que tiene forma de cruz latina y una techumbre abovedada que brilla gracias a las placas de granito pulido. Las paredes son de un gris elegante y el suelo, salpicado de rosa, crea una atmósfera que te transporta a otra época.
La historia del panteón de Sevilla comienza en 1767, cuando Carlos III decidió que era hora de hacer limpieza y expulsar a la Compañía de Jesús. En este contexto, el oidor y asistente real Pablo de Olavide tuvo una idea brillante: pedirle al rey que le diera la Casa Profesa y el Templo de la Anunciación para crear una nueva universidad. Y así, en 1771, nació la Universidad Literaria, el ancestro de la actual Universidad Hispalense. ¡Imagina las fiestas universitarias que debieron celebrarse en ese entonces!
Saltamos a 1836, cuando el deán Manuel López Cepero decidió que era hora de hacer un rescate histórico de la mano de la Universidad Hispalense. Su propuesta fue recuperar monumentos y motivos funerarios de conventos y templos que habían sido saqueados durante la ocupación francesa. Aunque la Catedral no podía albergar estas joyas, el Templo de la Anunciación fue elegido como su nuevo hogar. Así, este lugar se convirtió en un auténtico santuario para la memoria colectiva de Sevilla.
En la década de 1970, bajo la dirección del director general de Bellas Artes, Florentino Pérez Embid, se llevó a cabo una renovación impresionante que transformó la cripta en el Panteón de los Sevillanos Ilustres. No solo se realizaron trabajos de limpieza, sino que también se amplió el espacio, permitiendo que más figuras ilustres se unieran a esta galería de leyendas. Así, el Panteón no solo guarda monumentos, sino también las historias de aquellos que han hecho vibrar la cultura sevillana a lo largo de los siglos.
Enterramientos más ilustres de Sevilla
Hermanos Bécquer
Entre los ilustres que descansan en este panteón se encuentran los hermanos Bécquer, Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870) y Valeriano Bécquer (1833-1870). Gustavo Adolfo es uno de los poetas más reconocidos del romanticismo español, famoso por sus rimas y leyendas que capturan la esencia del amor y la muerte. Su obra ha dejado una huella profunda en la literatura española, convirtiéndolo en un referente para generaciones de escritores. Valeriano, por su parte, fue un destacado pintor que contribuyó al movimiento romántico con su arte, además de ser un ferviente defensor de la pintura sevillana. La unión de ambos en este panteón simboliza la rica tradición literaria y artística de Sevilla, donde sus legados siguen inspirando a muchos.
Alberto Lista y Aragón
Alberto Lista y Aragón (1775-1848) fue un sacerdote y poeta cuyo legado se centra en la educación y la literatura. Como sacerdote, se comprometió a formar a estudiantes y a promover el conocimiento, dejando una marca significativa en la enseñanza en Sevilla. Su obra poética refleja una profunda sensibilidad hacia la naturaleza y la sociedad, lo que le permitió conectar con las inquietudes de su tiempo. Su tumba en el Panteón rinde homenaje a su labor como educador y su impacto en la cultura sevillana, consolidando su figura como un símbolo de la importancia de la educación en la formación de la identidad cultural de la ciudad.
Félix Reinoso y Gómez
Félix Reinoso y Gómez (1795-1865) fue un destacado sacerdote y sabio que se dedicó a la educación y la investigación histórica en Sevilla. Su trabajo en el ámbito académico promovió el pensamiento crítico y la cultura en la región. Reinoso es recordado por su compromiso con la enseñanza y su influencia en el desarrollo de la educación en la ciudad. Su lápida en el Panteón es un tributo a su dedicación al saber y su contribución a la cultura sevillana, siendo un ejemplo de cómo el conocimiento puede transformar sociedades.
Blanco White
Blanco White (1775-1841), un pensador y poeta de origen inglés, se estableció en Sevilla y se convirtió en una figura clave del pensamiento liberal español. Conocido por sus críticas sociales, su obra literaria abarca poesía y ensayos que reflejan su entendimiento de la sociedad de su tiempo. Su influencia trascendió fronteras y su lápida en el Panteón es un homenaje a su valentía intelectual y su compromiso con los derechos humanos, simbolizando la lucha por la libertad y el pensamiento crítico en una época de grandes cambios.
Manuel María Arjona
Manuel María Arjona (1780-1840) fue un sacerdote y educador que desempeñó un papel vital en la educación sevillana. Defendió la enseñanza como medio para el progreso social y personal, formando a muchas generaciones de estudiantes. Además, se dedicó a la investigación histórica, contribuyendo al estudio del patrimonio sevillano. Su tumba en el Panteón honra su legado educativo y su compromiso con la cultura en Sevilla, recordando la importancia de la educación en el desarrollo de la sociedad.
Rodrigo Caro
Rodrigo Caro (1573-1647) fue un escritor y poeta destacado del Siglo de Oro español, conocido por su obra que combina poesía y prosa que también se encuentra en el panteón de los ilustres sevillanos. Su capacidad para capturar la belleza de la vida a través de sus versos lo consolidó como una figura influyente en la literatura española. Caro defendió la lengua y la cultura españolas, y su tumba en el Panteón es un tributo a su legado literario, representando la riqueza cultural del Siglo de Oro y su contribución a la identidad literaria de Sevilla.
Federico Sánchez Bedoya
Federico Sánchez Bedoya (1795-1873) fue un militar y político que se comprometió al desarrollo social y cultural de Sevilla. A través de su servicio público, promovió reformas que mejoraron las condiciones de vida de los sevillanos. Además, fue un apasionado coleccionista de artefactos arqueológicos, convirtiendo su hogar en un centro de interés cultural. Su tumba en el Panteón rinde homenaje a su dedicación al servicio público y su impacto en la vida cultural de Sevilla, demostrando cómo el compromiso ciudadano puede generar cambios positivos.
Regla Manjón
Regla Manjón (c. 1800-1875), condesa de Lebrija, fue una figura prominente en la sociedad sevillana, conocida por su pasión por la arqueología que también se encuentra en el panteón de los ilustres sevillanos. Su casa-palacio se convirtió en un punto de encuentro para estudiosos y amantes de la historia debido a su vasta colección de artefactos arqueológicos. Su tumba en el Panteón reconoce su contribución al patrimonio cultural de Sevilla y su papel en la conservación de la historia, mostrando que el amor por el pasado puede enriquecer el presente.
José Gestoso
José Gestoso (1842-1910) fue un historiador y arqueólogo que dedicó su vida al estudio de la historia de Sevilla y Andalucía. Su trabajo investigativo y su compromiso con la preservación del patrimonio cultural lo convirtieron en una figura destacada en la comunidad académica. Gestoso escribió numerosas obras sobre la historia local, contribuyendo a enriquecer el conocimiento sobre Sevilla. Su tumba en el Panteón honra su dedicación a la investigación y la promoción de la historia sevillana, reflejando la importancia de conocer nuestras raíces.
Antonio Martín Villa
Antonio Martín Villa (c. 1820-1885) fue rector de la Universidad de Sevilla, promoviendo la educación superior en la ciudad. Su liderazgo contribuyó al desarrollo académico y cultural, fomentando el pensamiento crítico entre los estudiantes. Su compromiso con la educación dejó una huella duradera en la comunidad académica, y su tumba en el Panteón es un homenaje a su dedicación al conocimiento y la educación, simbolizando la importancia de formar a las futuras generaciones.
Mota Salado
Mota Salado (c. 1825-1900) fue otro importante rector de la Universidad de Sevilla, cuya labor fue clave en la modernización de la institución en el siglo XIX. Con un enfoque en la expansión académica, Mota Salado trabajó para elevar el perfil de la universidad. Su tumba en el Panteón honra su legado en la educación y su contribución al progreso académico en Sevilla, destacando la necesidad de adaptación y evolución en el ámbito educativo.
José Amador de los Ríos
José Amador de los Ríos (1818-1878) fue un historiador y crítico literario que se destacó por su labor en el estudio de la literatura y la historia de Sevilla. Sus escritos sobre la historia literaria española lo consolidaron como una figura clave en el ámbito académico. Su tumba en el Panteón es un tributo a su dedicación al conocimiento y su impacto en la cultura sevillana, recordando que el estudio y la reflexión son fundamentales para el crecimiento cultural.
José María Izquierdo
José María Izquierdo (c. 1830-1890) fue un ateneísta conocido por su papel en la creación de la Cabalgata de Reyes, una tradición emblemática de Sevilla. Su visión y compromiso con la cultura popular llevaron a la organización de esta festividad, que sigue siendo una celebración importante en la ciudad. Su tumba en el Panteón honra su contribución a la cultura sevillana y su dedicación a las tradiciones locales, mostrando cómo el arte y la cultura pueden unir a las comunidades.
Cecilia Bölh de Faber (Fernán Caballero)
Cecilia Bölh de Faber (1796-1877), conocida como Fernán Caballero, fue una escritora sevillana que destacó en la literatura del siglo XIX. Su obra, que incluye novelas y ensayos, captura la vida y las costumbres de Andalucía, convirtiéndola en una voz representativa de la literatura andaluza. Su lápida en el Panteón es un homenaje a su legado literario y su contribución a la cultura española, recordando su influencia en la tradición narrativa andaluza y su capacidad para reflejar la esencia de su tiempo.
Esperamos que este artículo sobre el panteón de los ilustres sevillanos te haya parecido interesante.
¡No te quedes en la superficie! Descubre los misterios ocultos y las historias fascinantes de Sevilla en nuestro blog en Salir por Sevilla. ¡La historia te está esperando!
Por cierto, síguenos en nuestras redes para no perderte nada.